8.6.06

Todavía tan tonto.

Gabriela Mistral escribió:

"Yo soy todavía tan tonta que le pido perfección a la gente [...]"

Desde que mi madre me recitó ese pequeño fragmento de uno de los cuantos libros personales de Gabriela Mistral, hace ya más de tres semanas, me ha invadido en profundidad esa idea (será en gran medida porque fue mi madre quien me lo dijo, con esa mirada que tiene ella, y quizás todas las madres, que de algún extraño modo obliga a recordar que de ella vengo). Todavía la frase resuena en mi cabeza y me asalta cada vez que me encuentro juzgando negativamente a alguien. Ha sido un alimento para mi conciencia, una roca en el devenir de mis pensamientos, digamos, un espejo mental.

Hoy, en gran parte influenciado por mis lecturas de Varela y Maturana, atacado aún por Mistral, he llegado a aceptarlo y confiezo: pido perfección a la gente. Mi conflicto viene de que no me considero una persona intolerante, es más, gusto de escuchar distintos puntos de vista, y siempre ando buscando una conversación interesante en donde se intercambien (creen) ideas y no hechos. Me pregunto entonces qué será para mi esa perfección que le pido a todos de forma tan estricta. El problema del otro hacia mi nace de la no aceptación de la no aceptación, rechazo profundamente al rechazo, en todas sus formas y contextos. Se que aquella mirada triste de cualquier desconocido me afectará, porque entiendo (siento) que juntos creamos el espacio en donde vivimos, y que el ambiente y yo estamos intrínsecamente conectados. Por ello lo rechazo, ignoro y destruyo salvajemente, como animal defendiendo mi territorio, como hombre en busca de sus propios sueños y convencido hasta los huesos de que el amor SIEMPRE es, no sólo posible, sino que lo más fácil. Pido perfección en el sentido de que pido amor, y pido y pediré porque nunca he entendido en qué punto nos desviamos y se comienza a volver todo tan complicado como para olvidarnos de que lo que queremos y el camino para lograrlo coinciden: amor.

1 comentario:

Cpunto dijo...

me gustaría decir así, una y otra vez que lo es siempre,

que todos los amores lo son,